fbpx
André Ferreira
Publicado: agosto 09, 2021

Las estrellas de una noche de verano

 

Anoche, aprovechando el aire fresco que corría y después de un día caluroso de este verano un poco atípico de 2021, y  mientras observaba las estrellas, pensaba algo que el insomnio me llevó a compartir con Uds. Había leído la noticia de un conjunto de cinco hermanas carnales, que todas entraron en un monasterio de España. Las cinco son jóvenes, inteligentes, con carreras universitarias y con un porvenir interesante. Dejaron sus amigos, sus vestidos y pantalones, sus viajes y sus familias inclusive. Y se fueron a Burgos a una comunidad religiosa. Horas de Adoración al Santísimo, horas de apostolado, horas de un convivio que procura lo sobrenatural buscando la santidad.

Esa noticia me traía a la memoria, el caso de tres hermanos malagueños, que se ordenaron sacerdotes el mismo día hace algunos años. Los tres inteligentes y con un buen porvenir profesional, económico y social.

Conozco otro caso. Cuatro hermanos que concelebraron en la Archidiócesis de Toledo, el Funeral por su madre recientemente fallecida.

Vuelvo a mis estrellas. Cada una brilla de una manera diferente, con luz propia, pero todas hacen parte de un conjunto. Y es conjunto anoche estaba fulgurante. Los casos de los hermanos sacerdotes y las hermanas monjas también brillan en ese gran firmamento que es la Iglesia.

Familias que son bendecidas por la Providencia Divina y en el seno de las cuales, surgen muchas vocaciones.

El matrimonio junto al sacerdocio y la vida consagrada también es una vocación. Las familias deben ser ambientes en los cuales estas tres vocaciones deben poder surgir.

Y así el firmamento de la vida humana tendrá siempre estrellas que brillen por su santidad. El Concilio Vaticano en la Constitución Lumen Gentium (N. 11) habla de la vocación universal a la santidad. Eso vale para todos por tanto. Para mi que escribo y para ti que me les. Pidamos a la Virgen de la Misericordia que nos ayude. Y lo lograremos.

No tengo duda, y las estrellas que admiro en la noche toledana como que me lo confirman.